
¿Los láseres funcionan para el acné?
Michael Gold, MD, Gold Skin Care, Nashville, TN; publicado en Practical Dermatology, vol. 13, núm. 4 de abril de 2016Según la Academia Estadounidense de Dermatología (AAD), cerca de 50 millones de estadounidenses tienen acné, una afección que puede provocar problemas físicos y psicológicos importantes. Hay una multitud de opciones de tratamiento para el acné disponibles en la actualidad, que incluyen la terapia tópica, los antibióticos, la isotretinoína, los anticonceptivos orales y/o los dispositivos basados en láser y luz. Las nuevas directrices de la AAD para el tratamiento del acné vulgar sugieren que la combinación de terapias brinda las mejores posibilidades de eliminación. Los láseres representan una opción extremadamente atractiva para los pacientes con acné que no han respondido a las terapias tradicionales y para aquellos que no pueden o no quieren tomar medicamentos orales, incluidos antibióticos o isotretinoína. Al principio, se depositaron muchas esperanzas en la luz azul para el acné y, si bien esto puede ser eficaz, existen algunos inconvenientes inherentes. Para empezar, las terapias para el acné con luz azul son las más adecuadas para los casos de acné leve a moderado. Es probable que los pacientes con acné grave no se beneficien de la luz azul. Por lo general, esta modalidad solo es eficaz para matar los tipos más comunes de bacterias del acné, no algunos de los casos atípicos que sabemos que pueden causar o empeorar el acné. El intenso calor de la generación anterior de láseres causó dolor, quemaduras y/u otros efectos adversos. Otros dispositivos basados en la luz, como la luz pulsada intensa (IPL) y los láseres de diodo, no poseen una potencia de calentamiento tan profunda. En cambio, muchos aplican «mecanismos de succión» en la piel para acercar las glándulas sebáceas afectadas a la superficie cutánea. Esto puede hacer que el procedimiento sea menos higiénico y puede aumentar el riesgo de propagación de la P. acnes bacterias en las zonas de la piel no afectadas. Por estas razones, ha habido un enorme entusiasmo por el Neo de Aerolase para el tratamiento del acné vulgar. Este láser de 650 microsegundos trata de forma eficaz y segura a pacientes pediátricos y adultos con acné, independientemente del tipo de piel. Penetra más profundamente que cualquier otra modalidad de láser/luz, lo que permite que la energía llegue a las glándulas sebáceas, donde destruirá las bacterias. El Neo ataca selectivamente el agua, la melanina y la hemoglobina, los tres componentes principales de la glándula sebácea. Es un láser de pulso corto y, debido a esto, se dirige realmente a los componentes vasculares del acné y coagula los capilares sanguíneos para calmar la inflamación y el enrojecimiento. También reduce el crecimiento del cabello para prevenir la formación de nuevas obstrucciones en las glándulas sebáceas.